Principios del Puerta a Puerta
Acerca al ciudadano la problemática de los residuos
El sistema puerta a puerta se sustenta en una filosofía muy concreta: acercar
al ciudadano el problema de los residuos para hacerlo partícipe del mismo
como primera forma para minimizarlo. Hay dos líneas estratégicas muy diferenciadas para afrontar el reto de la generación abusiva de desechos:
1) Implantar la más alta tecnología al final de la
cadena de los residuos y tratarlos, reciclarlos o transformarlos con la máxima eficiencia, pero a cambio de alejar también el problema de la gente. Por
ejemplo, actualmente la población no vive ni conoce, ni siquiera es suficientemente consciente del problema de la basura, ya que cada día la vierte en
un contenedor y simplemente al día siguiente ha desaparecido.
2) Modificar los hábitos de consumo para producir menos desechos y hacer una
separación en origen, para su recogida por separado. A partir de este punto,
todas las fracciones se tratan de manera independiente.
Apostar por un sistema de recogida Puerta a Puerta es apostar por un sistema de recogida selectiva de residuos que no sólo supone recoger de forma diferente, sino que también supone una gestión de todo el ciclo de los residuos municipales eficiente, transparente y ambientalmente correcta. Recoger los residuos puerta a puerta signifca animar a la población a hacer un esfuerzo ambiental importante pero al mismo tiempo reconocerle este esfuerzo en forma de una gestión muy correcta de sus residuos y, por lo tanto, revirtiendo directamente sobre el ciudadano el mérito de una labor bien realizada.